Obispo de Arecibo alertó sobre los tratamientos “transición de género” en el Proyecto de la Cámara 683

"Adonde no hay amor, pon amor y sacarás amor"

Obispo de Arecibo alertó sobre los tratamientos “transición de género” en el Proyecto de la Cámara 683

2021-05-28 Legislación 0

El Obispo de Arecibo, Monseñor Daniel Fernández Torres, alertó sobre la disposición sobre los tratamientos de “transición de género” en el Proyecto de la Cámara 683.

Las declaraciones del Obispo se dan dentro del Memorial Explicativo sobre el Proyecto, actualmente bajo consideración de la Comisión de Bienestar Social, Personas con Discapacidad y Adultos Mayores y Comisión de lo Jurídico de la Cámara de Representantes. El Memorial le fue requerido al Obispo por el Director Ejecutivo de la Comisión de lo Jurídico, en carta fechada el pasado 21 de mayo.

En su exposición, el Obispo alertó sobre el peligro de que la medida que originalmente pretende prohibir las “terapias reparativas”, apruebe las terapias de “transición de género” en su artículo 3-b-ii. Al respecto, dijo que “esta preocupación es particularmente importante por la proliferación en todo Estados Unidos y a nivel mundial de los ‘tratamientos de transición de género’ en menores de edad, donde se les comienzan a administrar drogas para suprimir la pubertad desde edades tempranas y luego hormonas del sexo opuesto siendo todavía menores de edad, y llegando incluso hasta procesos quirúrgicos en estos menores de edad”. Amplió que diferentes Estados han aprobado este tipo de legislación que, con la excusa de prohibir las “terapias de conversión”, reconoce y valida las terapias de “transición de género”. Así, no sólo se le prohíbe al profesional de la salud explorar que el menor se reconcilie con su sexo biológico, sino además se abre las puertas a los cambios de sexo como la única alternativa legal.

De forma paralela, explicó que la primera línea de promoción de estas prácticas de “transición de género” es el establecimiento de los currículos con la ideología de la perspectiva de género en las escuelas, “donde se les dice a los niños que no hay tal cosa como niños y niñas”. En Puerto Rico, destacó que tanto el PS 185 como el Estado de Emergencia del gobernador Pedro Pierluisi pretenden imponer los currículos con ideología de género en las escuelas.

“Ante el riesgo de experimentación sin precedentes con los niños de Puerto Rico que representa el propuesto artículo 3 (b), en el inciso (ii), que sin lugar a dudas puede considerarse una explotación de menores a beneficio de los intereses económicos del mercado de hormonas y cirugías, cabe recordar el deber ‘no negociable’ según mencionado al principio de mi ponencia, de ‘la tutela social de los menores’ y ‘la liberación de las víctimas de las modernas formas de esclavitud’. Por lo tanto, entendemos que no puede ser aprobado un proyecto de ley que consagre las intervenciones de ‘transición de género’”, declaró el Obispo sobre el PC 683.

“Por otro lado, deseo aprovechar para dar mi apoyo a la intención legislativa de otro proyecto de ley que se encuentra bajo consideración de esta Comisión, el Proyecto de la Cámara 768, precisamente dirigido a proteger a los menores de edad de los nocivos tratamientos de ‘transición de género’ [cambio de sexo]. Sin entrar en detalles particulares de este otro proyecto de ley que pudieran corresponder a los laicos, la intención legislativa del PC 768, según radicado, cumple con el fin no-negociable de ‘la tutela social de los menores’ y ‘la liberación de las víctimas de las modernas formas de esclavitud’”, prosiguió.

“En ambos proyectos, es mi deber como Obispo aclarar que el Catecismo de la Iglesia Católica establece en el número 2333 que ‘Corresponde a cada uno, hombre y mujer, reconocer y aceptar su identidad sexual’, por lo que no apoyo los tratamientos de transición de género a ninguna edad. No obstante, mi apoyo a la intención legislativa del Proyecto de la Cámara 768 de proteger a los menores de edad de los nocivos tratamientos de transición de género, se da en un contexto paralelo a mi apoyo a proyectos de ley que han intentado limitar el terrible daño del aborto legalizado en menores de edad, por ejemplo, exigiendo que se notifique a los padres. Al respecto, explica la Congregación para la Doctrina de la Fe, ‘a propósito del caso en que no fuera posible evitar o abrogar completamente una ley abortista en vigor’ –en este caso, podríamos decir la permisión actual de estos tratamientos de transición de género o cambio de sexo en adultos—‘un parlamentario, cuya absoluta oposición personal al aborto sea clara y notoria a todos, pueda lícitamente ofrecer su apoyo a propuestas encaminadas a limitar los daños de esa ley y disminuir así los efectos negativos en el ámbito de la cultura y de la moralidad pública’”, concluyó.